viernes, 29 de noviembre de 2013

BAUHAUS - MASK


Año: 1981
País: Reino Unido
Género: Post-punk.Gothic
Puntuación: ▲▲▲▲1/2


Segunda gran producción de la banda gótica Bauhaus, importante nombre en la escena inglesa de inicios de los ochenta direccionada en una vertiente post-punk oscura y tétrica, su propuesta sigue lo trazado por su predecesor, mas se adentra en atmósferas de mayor elaboración y complejidad, etérea, pasajes en los que la fría voz de su vocalista Peter Murphy nos va relatando historias funestas, paranormales y desquiciadas en escenarios de ultratumba, claustrofóbicos y morbosos, que podrán servir cómodamente como fondo para alguna película americana de horror de clase B, en los cuales la desdicha amorosa y humana tiene valida cabida.

"Hair of the Dog" da inicio al disco en una difusa atmosfera de noise eléctrico y batería tribal, sembrando la tensión y la perturbación sensorial dejándose llevar por la rítmica en bajo y confusos teclados que otorgan una sensación de alucinación perversa junto con un fogoso e intenso Murphy; sigue "Passion of Lovers" con tórridas reflexiones amorosas en densas masas sónicas con astutos destellos de luz en su estribillo que incitan a una suerte de obsesiva flagelación mental; “Of Lillies and Remains” es un excelente muestrario de su talento en la construcción de piezas psicóticas y rítmicas (que adelanta al sonido de los Pixies) que se condimentan en sus mórbidos recursos y efectos de clavijas oxidadas, demencia y sensación de estar en un callejón sin salida; y “Dancing”, una ávida pieza con sonoridad de referencia al gótico de Joy Division o Siouxie And The Banshees.



Su mayor empleo de sintetizadores para este disco genera una interesante comunión de la rítmica de su sonido con la engatusante experiencia sensorial que otorga las densidades conseguidas por los teclados, “In Fear Of Fear” da fe de ello en una pieza bizarra que mezcla el sci-fi con la oscuridad tétrica del gótico de Joy Division, “Hollow Hills” es un efuerzo por explorar atmósferas más limpias y valerse de su talento en la voz y en los coros para confabular la estructura de la canción, no resulta mal aunque marcadamente disonante en el disco y cansina en reeescuchas; “Kick in the Eye” mezcla una rítmica disco-funk clon su postura gótica de manera astuta, incitando a un baile ritual new-wave con inclinación a unos Talking Heads, “Muscle in Plastic” resulta más conseguida por su sinergia de batería y bajo, otorgando un calamitoso tempo que parece detonar en cualquier momento ante la desquiciante voz de Murphy, corte que conserva cierto encanto crudo y minimalista de su sonido caótico; y “The Man with the X-Ray Eyes” es simple y efectiva, cuyos momentos sin acompañamiento vocal hacen cierta referencia al bubblegum sesentero.

Cierra “Mask”, corte homónimo que explora un gótico-industrial sensorial pastoso y apocalíptico, que claramente podría haber influenciado a unos noise My Bloody Valentine en los 90s.

THE ROLLING STONES - VOODOO LOUNGE


Año: 1994
País: Reino Unido
Género: Alternative.blues-rock
Puntuación: ▲▲1/2


Aceptable disco de estudio de la banda, si bien varias de sus piezas pecan de genéricas y formulistas, se logra apreciar un mayor interés por la construcción melódica y musical por momentos, mas su innecesaria prolongación hacen que la experiencia musical sea poco memorable, relleno de piezas genéricas y olvidable en reescuchas.

Varias de sus piezas se satisfacen en construcciones facilistas de estribillos pegajosos, letras complacientes, secciones rítmicas derivadas y ya a estas alturas poco sorprendentes, “Love Is Strong” por ejemplo no ofrece nada nuevo, mas resulta aceptablemente escuchable y disfrutable en un par de escuchas, luego se esfuma la magia y pierde su impacto y querencia por su escucha; “You Got Me Rocking” con estribillo atractivo para ser coreado en conciertos, aunque su construcción del clímax resulta bastante complaciente y su poca creatividad la prolonga sin dirección ni atractivo hasta ,los tres minutos y medio, habiéndose acabado el interés y el factor ‘sorpresa’ a algo menos de los dos minutos de su escucha; la entretenida “Sparks Will Fly” es una dinámica pieza aceptable en términos generales; más piezas genéricas sin trascendencia como “I Go Wild”, “Mean Disposition” o “Baby Break It Down”; y “The Worst” es una forzada y falsa balada country a la voz de Richards que a pesar de durar menos de dos minutos y medio termina sintiéndose tediosamente interminable.


Otro factor a resaltar es la considerable cantidad de contenido pop del disco, lejos de sus mejores y más inspirados momentos sesenteros, mas por momentos lo suficientemente atractivo e interesante; “Moon Is Up” por ejemplo resulta notable en su idea y concepción, aunque floja vocalmente, y derivativa del “Planting Bad Seeds” de los Skip Bifferty; “Sweethearts Together” es rica en matices y simpático colorido musical, no resulta nada mal si no fuera porque se extiende innecesariamente hasta casi los cinco minutos de duración, además de contar con un breve solo de acordeon que insinua sutilmente de cierto aire de cumbia-vallenato colombiano a la pieza; “Blinded By Rainbows” suena derivativa e intrascendente, además que falsa, sin feeling, extensa y de poca creatividad y trabajo en la construcción musical; y ”Out Of Tears” cumple con desarrollar la sensibilidad y atmósfera sensorial, aunque su sobremanoseo FM en producción provocan una sensación de ‘abusiva castración’ del sonido e identidad musical stoniana.

Talvez lo más notable sea “Brand New Car “, sugerente pieza rock que ofrece una atmósfera hipnótica y lujuriosa; “Suck On The Jugular“ con dinámica sección rítmica funk y suculento solo de harmónica; “Mean Disposition”, notable rock’nroll con resonancia boogie y rugosidad garage bastante disfrutable; cerrando un trabajo discográfico efectivo en su globalidad, pretencioso aunque valga decir que ofrece la suficiente variedad como para disfrutarse en reescuchas.

THE HORRORS – PRIMARY COLOURS



Año: 2009
País: Reino Unido
Género: Indie.Post-punk-revival
Puntuación: ▲▲


Segunda producción de la banda inglesa que se aleja de su sonido garage-punk y noise-rock para adentrarse en exploraciones con enfoque post-punk derivado del rock gótico con clara alusión a las grandes bandas ochenteras como Bauhaus, Joy Division, Chameleons, o Jesus And Mary Chains, así como de la movida alternativa noventera de bandas dream-noise como My Bloody Valentine.

Lo malo es que su oferta queda muy inferior en comparación con sus grandes mentores, redundando en recursos simplistas sin mucho atractivo ni factor sorpresa; complacientes y formulistas resultan entretenidos y atractivos en un primer momentos mas terminan delatando su poca originalidad tras posteriores escuchas.


“Mirror´s Image” es un aceptable punto de inicio, su estructura deriva del “I Wanna Be Adored” de los Stone Roses comenzando con un sutil inicio ambient que vira en una dirección retorcida y difusa, densidades contrapuestas caprichosamente dibujan una atmósfera nebulosa de noise-shoegazer, su efecto de vértigo y sutil aroma oriental contribuye a la conceptualización de caos y confusión; “Three Decades” sigue la propuesta aunque con mayor saturación ya con enfoque a unos My Bloody Valentine en una pieza que sacrifica melodía por noise, nada nuevo ni encantador en reescuchas; “Who Can Say” resulta nuevamente derivativa y formulista con enfoque pop FM; y “Do You Remember” redundando en lo mismo.

“New Ice Age” presenta una cargada y tensa atmósfera gótica que mezcla a unos Wire con Bauhaus, catastrófica pieza con textos fatalistas, aceptable en primeras escuchas aunque pierde fuerza en cada reescucha; “Scarlet Fields” ofrece psicodelia atmosférica con perversión gótica; “I Only Think Of You” es el típico remedo joy-divisiano que taaaantas bandas jóvenes terminan realizando sin mayor trascendencia; “I Can´t Control Myself” con resonancia circense presenta un estimable concepto musical de demencia y perdida del autocontrol, mas su flojo desarrollo la convierten en predecible y olvidable; “Primary Colours” ofrece una sobresaturada densidad desquiciante sin atractivo ni melodía, redundante y sin pies ni cabeza ni dirección; y cierra la intrascendente “Sea Within A Sea”, flojo corte post-punk sin feeling ni clímax que peca de plagiar las notas del pasaje instrumental de teclados del “Just Go Away” de Blondie (cosa que también hizo Coldplay descaradamente y sin mostrar remordimiento alguno para el riff de su clásico “Clocks”).

martes, 26 de noviembre de 2013

LCD SOUND SYSTEM – SOUND OF SILVER



Año: 2007
País: Estados Unidos
Género: Electronic.post-punk
Puntuación: ▲▲


Multi-aclamado trabajo discográfico de la banda neoyorkina conformada por el inquieto James Murphy, importante colaborador y hacedor de una suerte de re-estructuración de la escena electrónica de la gran manzana luego del trágico evento del 9-11; notablemente afectado y sensibilizado por este triste acontecimiento en la historia americana, se enfocó en apoyar primeramente en producción (destacando su apoyo en el “Echoes” de los Rapture) y luego lanzaría sus trabajos como banda ya establecida.


Si bien el disco resulta disfrutable, se le otorga gratuitamente mucha relevancia y condescendencia pues al final de cuentas termina siendo un disco electro-dance aceptable y plausible, mas nada imprescindible; piezas genéricas derivadas de un Pete Gabriel electrónico o los Talking Heads, resonancia new-wave sin mucha novedad, saturación electrónica que siempre resulta suficiente para engañar al oído e incitar al baile en cualquier ocasión, una fórmula infalible que se aleja de los grandes acontecimientos de la escena electrónica como los Silver Aples y su primitivismo electrónico, el krautrock alemán de Neu!, el post-punk electrónico de fines de los 70s e inicios de los 80s por ambos lados del Atlántico, el acid-house de los Happy Mondays, la explosión electrónica de los Chemical Brothers, momentos cumbres de la música electrónica que recibieron menor cobertura mundial si lo comparamos con la suerte que corrió este trabajo discográfico a analizar.

Piezas ávidas de rica dinámica tanto vocal como sonora, ejercitan la mente y hacen que los sentidos se activan y surja su afán de exploración sonora; destacando tenemos “Time To Get Away”, divertida pieza post-punk con aromas a unos B-52´s; la plausible “Someone Great” ofrece una genial conjuración musical space y sci-fi que hereda de bandas krautrock como Neu! o Kraftwerk;y “North American Scum” también resulta muy disfrutable aunque su sonido deriva claramente de su “Daft Funk Is Playing At My House” sin mucha novedad.


La pieza clave del disco es “All My Friends”, sentida pieza de conseguida atmosfera hipnotizante en la cual se escucha un trance musical de piano muy al estilo de “Baba O'riley” (aunque inferior a este en honor a la verdad) con postura a unos Neu!, que se va enmarañando en una masa sónica consistente y maciza con huella de los Velvets y Eno, un melódico estribillo y un detonante desenlace llegan a su clímax en una pieza de melancolía y desolación.

El resto son piezas genéricas sin mucho trasfondo, redundantes y monótonas, terminan autocomplaciéndose en su rítmica dance sobreexplotada y por ahí sonoridades exóticas sin dirección ni clímax, cerrando el disco la pieza lenta “New York, I Love You But You're Bringing Me Down”, inequívoca pieza de sarcasmo agridulce que se perfila como lo más honesto y nihilista de un Murphy que se carcome el alma con ambivalencias y sentimientos encontrados, drásticamente disonante con el sonido del disco, aunque curiosamente resulta efectiva como corte de cierre.

jueves, 14 de noviembre de 2013

NARCOSIS PRIMERA DOSIS



Año: 1985
País: Perú
Género: Noise-Punk.Subte
Puntuación: ▲▲▲▲▲


Disco cumbre de la cultura underground del rock peruano, forjador del movimiento alternativo ‘subte’ de mediados de los 80s; absorben del garage temprano con pretensión explosiva de los Who, los Velvets, Blue Cheer o de un Hendrix explorando los terrenos del noise primitivo, la postura anárquica, inconformista y revolucionaria del punk inglés, la crudeza y suciedad, lúgubre y morbosa del proto-punk de Detroit y del punk neoyorkino, engendran un halo de perturbación y degeneración sónica en la que se mezclan gritos, alaridos, insultos y obscenidades verbales, cuerdas eléctricas oxidadas y corroídas que explosionan en estruendos y vorágines rabiosos exacerbados por la corrupción, la imbecilidad social, la hipocresía y la doble moral, la violencia despiadada, la carencia de moral y remordimiento; en una suerte de pretensión de reestructuración de una sociedad que se satisface en su mediocridad, la cual se queja, clama por un cambio o solución, una sociedad amansada como borregos incapaz de autoanalizarse y poder ejercer un cambio desde su propia introspección.

Nervudas secciones rítmicas minimalistas de noise-punk sirven de escenario para interesantes textos de cargado contenido anti-político (algo recurrente en el género subte), comienza con “Intro/La Peste”, pieza collage que toma como base el discurso político para modificarlo a su antojo como carta de presentación, conecta con su segunda parte, un caótico momentos punk que intenso riff y desquiciante sección rítmica; “Represión” es una de las mejores y más inspiradas piezas del disco en la cual dibujan a una sociedad decadente, controlada desde su nacimiento hasta su muerte y condenada a cumplir el ciclo de la vida siempre sumida en una represión social, política, legal, religiosa, mental-psicológica y moral, represión  en la cual curiosamente la sociedad se satisface hipócritamente al incumplirla buscando en sí mismo una excusa o motivo que justifiquen sus malos actos; “Destruir” es el siguiente paso, un intenso garage punk que formula la destrucción de la sociedad irreparable para poder crear una nueva estructura y encontrar así la salvación; “Triste Final” es la carta de advertencia que busca una reacción ante la apocaliptica realidad que se narra, una horrible realidad de delincuencia y corrupción que, a pesar de verse a diario en periódicos y televisión, la sociedad amansada a aprendido a ‘conllevar’ justificando su inacción por alguna solución; y “Excusas” justamente se encarga de responderse a si mismo como el justificante de la inacción, la sociedad de satisface conformistamente en el hecho de haber delegado las responsabilidades a un orden político del cual la misma sociedad reclama y se queja, un circulo vicioso en el cual solo los altos rangos se regocijan en su impunidad y la clase social trabajadora queda resumida en sus eternos lamentos y sus clamores de cambios, amansada por diversos conceptos abstractos como el miedo, la justicia divina o la represión mental.


“Sucio Policia” muestra sin tapujos una intro de balacera cruda y mórbida, balas perdidas se disparan en una sociedad violenta y caótica, unos alaridos o gritos adicionales no le hubieran venido mal para condimentar la tensa intro; crítica dura hacia el poder que se la sociedad le delega a una policía corrupta e ineficiente, insultos y ofensas fueras de tono surgen como una herramienta de expresión de la indignación social; “Vida Actual” narrando  el vacio moral de la perdición nocturna juvenil, hereda mucho del estilo de los Velvets en su disco debut con Nico; “Hemicirco” es una esquizofrénico corte punk con aromas al alternativo underground de la primera mitad de los 80s de bandas como Wipers o Mission of Burma; ”La Danza De Los Cristales”  opresivo tema con difusa atmósfera que explora la psicodelia temprana de bandas como los “13th Floor Elevator” en una suerte de nebulosa depresiva y flagelante con percusión tribal, marca un desfase muy astuto del sonido del disco al explorar en su analogía lírica y en su compleja interpretación sensorial un concepto más sofisticado que lleva su primitivismo punk a terrenos del art-punk de bandas como Wire; y “Destino” es otra genialidad en la cual aciertan tremendamente al recurrir a vacios arreglos corales y vocales cuasi-psicodélicos que acentúan la angustia y la preocupación del curiosamente incierto y a su vez parametrado destino que le depara a la sociedad.

“Dextroza” es una depravada pieza que muestra una deformación industrial vocal muy a lo Throbbing Gristle bastante perturbadora y amorfa, su atmosfera juega tanto con el industrial como con el freak-rock, el sci-fi y noise primitivo y abstracto de los Velvets; su segunda parte desencadena in incisivo punk nervudo y sudoroso que desfoga con lisuras y obsenidades la insatisfacción y frustración cargada del disco, además de presentar efectos y sonoridades muy a lo Zappa; y “El Microbus” es una curiosa pieza que exhibe la violencia en la que la sociedad se ve sometida tan fácilmente y a diario adoptándola como algo cotidiano e irreparable.


En términos globales, una genialidad que presenta sus textos de postura rebelde y anti-politica de manera concisa, puntual e inteligente en un sonido visceral y primitivo mas no se satisface en ello, sino que busca la exploración art-punk de su talento consiguiendo así majestuosas  piezas conceptuales disfrutables por su muy bien desarrollada filosofía y sensibilidad, y una de las cumbres máximas del rock peruano.

viernes, 8 de noviembre de 2013

LOS JAIVAS - ALTURAS DEL MACHU PICCHU


 

Año: 1981
País: Chile
Género: Fusion.Art-rock
Puntuación: ▲▲▲▲▲


En el proceso creativo de la vasta gama y diversidad de obras musicales, la fuente de inspiración resulta igualmente diversa al absorber alguna idea o concepto para el desarrollo del trabajo discográfico; cuando el poema se convierte en canción, si bien la poesía contiene una palpable musicalidad para el oído, surge válidamente como necesidad posterior una suerte exploración por otorgar una interacción sensorial, una atmósfera conceptual que juegue con los sentidos y con las evocaciones mentales sobre los paisajes y criaturas, circunstancias, alegrías y tristeza; en fin, Los Jaivas ofrecen es esta, probablemente, su máxima obra cumbre dentro de una sumamente respetable y rica discografía en la cual, tocados por la sensibilidad poética del poemario de Pablo Neruda “Canto General”, recrean con un enfoque art-rock fascinantes pasajes  ricos en colorido y exuberantes en su mistura de instrumentos, ritmos y estilos musicales propios de su querencia latina.


”Del Aire Al Aire” ” da inicio con un pausado e introspectivo pasaje en zampoña, efectos de aves revoloteando simulan el barullo que generan al desprenderse de las ramas de los arboles, y el apacible silencio de la pieza ofrece una sensibilidad inmaculada de paz, reflexión y meditación en conexión con la sabia naturaleza; “La Poderosa Muerte” es el momento cumbre del disco, una pretensión pieza de once minutos que mistura una rica variedad de géneros como la música clásica en su parte inicial, la música fílmica que retrata inhóspitos paisajes llenos de colores y texturas sensoriales, la cueca inspira el estilo de los cantos vocales seguido por una suerte de diablada estilizada, y el clímax se desencadena en un calamitoso pasaje progresivo en su parte media con violines funestos, en la sección final se aprecia momentos intensos de catástrofes acentuados por trompetas fatalistas resolviéndose en un estruendo que marca el fin de la experiencia musical, una verdadera obra maestra a la altura de cualquier obra magna del progresivo clásico de King Crimson, Gentle Giant, Pink Floyd o de la música clásica en el rock como lo hicieron los Moody Blues y los Beatles (cuyo desenlace en “A Day In The Life” pudo haber inspirado el final de la pieza); “Amor Americano” es un pasaje folk andino que interactúa con un pasaje eléctrico de guitarra reemplazando a las trompetas que se suelen usar en este tipo de danzas marchantes; su estilo que evoca un huayno boliviano resulta un estratégico punto de fusión de la sofisticación progresiva anglosajona con su propuesta de ritmos y estilos etno-folklóricos; y  “Aguila Sideral con un nebuloso pasaje inicial que parece dibujar las frias y oscuras noches penumbrosas de las alturas andinas, noches en las que mágicas aves toman por asalto los cielos y revolotean en un enigmático brillo de su plumaje, resutla exquisito el piano de Claudio Parra que parece evocar esmeraldas brillando en la oscura noche cual estrellas iluminando un infinito e inalcanzable cielo.


“Antigua America” es una delicia para los oídos, mezcla gustosamente y de manera sublime una gama de géneros como el jazz fusión, el baroque, el folklore y el progresivo de manera segmentada que conjura una intro que catapulta nuestros sentidos a las alturas del Machu Picchu y nos permite descubrir su milenario conocimiento y absorber su inmaculada sabiduría; además de presentar por momentos subliminales insinuaciones orientales en la rítmica que resulta uno de los momentos más conseguidos del disco; “Sube A Nacer Conmigo Hermano” apunta al joropo venezolano que acentúa el contenido fusión del disco en un canto intenso en el cual se destaca la torbellinesca interacción de la percusión con las notas de piano, además de sorprender con un increíble solo eléctrico que se filtra con la altisonancia de la pieza en una suerte de mutación latina-tropical de su propio sonido como instrumento.

Arpegios en piano despiden el disco con “Final”; reflexiva pieza a voz coral y piano que retrata el desenlace inevitable de la vida, el océano de la muerte como punto final de la existencia.

ACE OF BASE - THE SIGN


Año: 1993
País: Suecia
Género: Eurodance.Synth-pop
Puntuación: ▲▲


Dentro de la parafernalia que le significo a los 90s el auge de la explosión techno (derivada en gran medida del new-wave y luego del acid-house mancuriano de fines de los 80s e inicios de los 90s), una de las agrupaciones europeas que supo ofrecer una alternativa estimable, muy disfrutable y sin recaer en excesivos manoseos formulistas ni autocomplacencias FM (bueno por lo menos en su primer disco) fue la banda sueca Ace of Base, singular agrupación que sigue la línea trazada por previas bandas new-wave; atmósferas bailables, melodías simpáticas para el oído y adictivas, letras sobre el eterno melodrama del desamor, y un coqueteo más que acertado con el sonido reggae, consiguiendo piezas de muy buen gusto que destaca de entre lo mas ‘decentemente’ rescatable de la plástica escena musical de los noventa.


Si bien como se indico previamente la técnica es la misma, merecen merito al presentar textos no tan redundantes ni triviales o melodías que no resultan recurrentes entre ellas mismas, destacando la genial “All That She Wants”, con intro en reggae y atmosfera de pausada rítmica; “Don't Turn Around” es uno de sus mejores cortes de temática agridulce con vicisitudes sobre el amor y las drásticas decisiones que uno termina tomando en nombre del mismo, su atmosfera lenta y pausada plasma cierta sensación de confusión y descontento propicia para la pieza; “The Sign” fue su mejor carta de presentación que destaca como uno de los singles noventeros más ‘decentemente’ memorables mostrando que se puede hacer algo auditivamente sofisticado y con atractivo musical sin caer en cursilerías ni manoseos radiales, imposible no corearla ni dejarse llevar por su simpática melodía vocal; y la demoledora “Happy Nation”, un claro derivado del “Hallelujah” de los Happy Mondays con menor contenido ácido y conseguida atmósfera dance de esoterismo y misticismo ocultista, su atmosfera por momentos se deviene en un letárgico trance cuasi-mántrico de algún ritual pagano.


“Living In Danger” es otra atractiva pieza de mistura techno-reggae con intentos hip-hop y aromas ácidos del Madchester-sound; “Wheel Of Fortune” nuevamente apuntando a unos Happy Modays en una muy disfrutable pieza rítmica; y el resto recae en synth-pop genérico en términos globales, sin trascendencia mayor mas que rellenar el disco destacando “My Mind”, experiencia eurodance ácida con estimable construcción musical que propician buenos momentos de new-wave y techno.

ALICE COOPER - MUSCLE OF LOVE


Año: 1973
País: Estados Unidos
Género: Glam.Shock-rock
Puntuación: ▲▲▲


Meritorio trabajo de un Alice Cooper continuando su propuesta shock-rock, el último con toda la banda original pues luego de este se enrumbaría su líder a una carrera como solista bajo el nombre de Alice Cooper; en términos globales el disco resulta genérico y sin aportar mucha sorpresa ni factor novedad para el conocedor del sonido de la banda, mas resulta una experiencia suficientemente atractiva y justificada pues su sonido se retrotrae a sus inicios, dejando de lado la parafernalia glam y se reencuentran en gran medida con su basamento garage-rock.

“Big Apple Dreamin'” abre el disco, resulta un corte derivativo con un riff atractivo, mas una construcción melódica de notorio facilismo, no satisface como apertura del disco; “Never Been Sold Before” es una muy disfrutable pieza con evocaciones al glam de Bolan, acerbos solos de guitarras y fastuosos arreglos de trompetas en fondo dotan a la pieza de opulencia sonora; “Hard Hearted Alice” es otra pieza redundante en su estilo, no muy inspirada comienza como tiempo lento que luego se agita en su parte media, otorga un meritorio clímax eléctrico-psicodélico, aunque algo desordenado; y “Crazy Little Child” retoma su querencia por el estilo vodevilesco, mas termina resultando disonante, oscuro e innecesario.


“Working Up A Sweat” es una genial pieza con resonancia rock´nroll, recuerda a unos primeros Rolling Stones por momentos, agitada y de vigorosa sección rítmica, al igual que “Muscle Of Love”, acerba pieza con momentos metal por ahí a lo Budgie, “Man With The Golden Gun” nos retrotrae a la atmósfera espectral de su “Billion Dólar Babies” o “School’s Out” en una ostentosa pretensión bastante conseguida con alusiones a James Bond; “Teenage Lament '74” es un corte pop mucho más calmado, arreglos corales góspel y una simpática y apacible atmósfera musical, muestra como la banda puede conseguir algo disfrutable sin recurrir a sobre-pretensiones hostigantes; y cierra “Woman Machine” pieza robusta de densidad y saturación eléctrica, no está mal como corte final pues posee momentos muy atractivos de psicodelia revolviana, aunque redundante en su estilo.