Gustosa escucha tras este muy original trabajo de la banda inglesa que oferta posturas post-punk de querencia vanguardista en su estilo minimalista de crudeza punk.
Mordaz y directo, los Wire no pierden tiempo y arremeten en veintiun cortes breves e instantaneos llenos de ímpetu juvenil y catarsis bohemia.
Arrancamos muy bien con "Reuters", atractiva pieza de avidos y fatidicos textos con fondo consistente de guitarras que adelantan la escencia del rock alvernativo noventero. La desenfadada "Three Girl Rhumba", corte breve de post-punk garagero.
La punzante "Lowdown" con textos sobre la vida banal; "Start To Move" con ciertos coqueteos con el bubblegum ramoniano. Agitados disparos de menos de un minuto, mas de intensa y sudorosa energía llenas de ánima de fines de los setenta como "It's so obvious" y sarcásticos textos cómicos como "Surgeon's Girl".
El corte que da nombre al disco "Pink Flag" es uno de los mejores que muestra su minimalista postura llevada a los casi cautro minutos jugando con recursos de tempos acelerados y ejercicios vocales de catarsis y descontrol. Su actitud desafiante contagia y consigue exaltar cierta garra juvenil interna.
Arranques anárquicos de incomformismo existencial contra el sistema en la pieza punk "Mr. Suit"; la notable "Strange" con riff de ascendencia ácida-garagera; la afrentosa "Mannequim", evocando surf y powerpop; y reflexiones superfluas sobre el amor en fondo pop-punk en "Feeling Called Love".
Soberbio trabajo heredero de la ola punk generada en las islas inglesas que nos dejó una gran variedad de respetables trabajos discográficos, de entre los cuales este épico trabajo destaca como uno de los más interesantes y sorbesalientes de los ultimos años de los setenta.
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